Durante las primeras décadas del siglo XX, la gente tenía muy claro qué estaba bien y qué estaba mal, qué era moral y qué era inmoral, qué era honroso y qué deshonroso, y en la actualidad todavía hay muchas personas que saben hacer esta distinción. Ahora bien, en los años 50 empezó a producirse un cambio que fue acentuándose más y más. Todas las ideas acerca de la virtud, la inmoralidad, el honor y la ética empezaron a parecer ilógicas, inhumanas e inaceptables.
Comenzaron a predominar ideas que ensalzaban al individuo. Existía la opinión de que cada persona debía poner sus propias metas y vivir para ellas. Lo que entonces se consideraba aceptable era la tolerancia, la diversidad y el no juzgar a nadie. En la nueva filosofía de la sociedad actual está prohibido prohibir.
La sociedad actual sufre un vacío de valores y se encuentra fragmentada en muchos estilos de vida. Un buen número de personas opina de la siguiente manera: ‘‘Todo estilo de vida es una alternativa aceptable, viva su vida y yo viviré la mía. Pueden tomarse muchos caminos y todos son buenos, no hay nada que esté mal. Defienda sus derechos, la violencia es una forma de libertad de expresión. Viva y deje vivir…’’
Ver video sobre como los hijos dicen, hacen y siguen lo que ven hacer a sus padres
Este video muestra como los padres ejercen una influencia, ya sea positiva o negativa en sus hijos. De allí que se vea la necesidad que los padres eduquen e inculquen en sus hijos valores morales, que sean de provecho para ellos tanto en el presente como en el futuro.
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